¿Desafuero o no?
Bueno. Esta es mi primera experiencia con un blog. Supongo que era sólo cuestión de tiempo. La conjunción de mi inquietud por escribir y el hecho de que estoy prácticamente todo el día frente a una computadora hacían que la probabilidad fuera alta hasta convertirse en uno ahora. :)Hoy (ayer en México) se decidió el desafuero de Andrés Manuel López Obrador. Circunstancia que ocupa los encabezados de la mayoría de los diarios -al menos los que puedo accesar por internet. Es un hecho remarcable, aunque honestamente no creo que precisamente para el bien del País. Y no lo creo por varias razones. La más importante tal vez sea que el proceso ha estado tan politizado que ahora es difícil saber quién tiene la razón. Durante este tiempo que he estado fuera de México he podido observarlo más críticamente, comparar por supuesto con otros países y sobre todo quererlo más.
Primero que nada, yo soy de la idea de que la ley debe aplicarse de manera irrestricta trátese de quien se trate. No estoy, ni estaré de acuerdo con la existencia de figuras jurídicas como el fuero o el amparo. Desde mi punto de vista tales cosas no son mas que parches de un sistema legal lleno de contradicciones y huecos. Esto último no es del todo sorprendente. Las leyes las redactan humanos. Los humanos somos falibles. Pero, volviendo al punto. Anoche, cenando con un amigo, Andrew, comentábamos del caso de unas personas que hace unos meses fueron arrestadas en Singapur por posesión y consumo de drogas. Para la mayoría la pena fué de algunos meses de cárcel más unas multas importantes. Entiendo que prácticamente todos eran parte del "jet set" singapurense. Comentábamos también que entre ellos había una persona que poseía más droga que el resto. Por unos cuantos miligramos se salvó de la pena de muerte. Me parece que su sentencia fué de 6 años de cárcel y 5 azotes con la caña. Por lo que me decía Andrew, la ley en ese sentido es simple. Si quien es arrestado posee más de una x cantidad en gramos de la droga, no hay vuelta de hoja. Significa tráfico de drogas, ergo, pena de muerte. Así de sencillo. Ni juicios, ni abogados, ni intercesiones divinas. Pena de muerte. Punto. Qué bonito. Lógica pura. Si A entonces B.
Regresando a mi México querido... no tienen idea de cómo me lastima, me avergüenza y me molesta a veces leer los diarios. Al país se lo está cargando el payaso (nada nuevo, eso ha venido ocurriendo desde antes de que yo naciera, sólo cambia el nombre del payaso), y los mexicanos... bien gracias. Haciendo marchas para defender al ciudadano jefe de gobierno del DF, o ufanándose de que lograron evadir al Estado Mayor Presidencial y se le apersonaron al Presidente en un mítin para gritarle de cosas. ¡Qué gran logro! Seguramente deben estar muy orgullosos quienes hacen esas cosas. Y deben sentirse patriotas. Vergüenza debieran tener.
Quiero mi país, y me da tristeza ver cómo sigue adormilado... y me da desesperación saber que no puedo hacer nada para cambiarlo...
En fin. Debo regresar al trabajo por ahora... luego seguiré con esto.. que me falta mucho por decir.